
▲ El quintanarroense Carlos Vela fue de los pocos personajes del mundo del balompié que no titubeó en respaldar a la comunidad migrante de Los Ángeles.Foto Afp
L
a preocupación estaba centrada en el público. Se temía que la gente, por seguridad, no asistiera al partido en Inglewood. En efecto, muchos decidieron no correr riesgos. No obstante, al SoFi Stadium acudieron 54 mil almas… Y resulta que la inquietud se movió hacia la cancha. Sucede que en estos momentos hay algo más frágil y vulnerable: el debilucho es el Tri de Javier Vasco Aguirre, que el sábado estuvo a punto de arrancar el grito “¡ehhh pu…!” por su mal juego, y quedó al borde del ridículo ante República Dominicana, debutante en Copa Oro.
En un entorno del todo adverso, miles y miles de osados mexicanos fueron al estadio –cierto, los precios de los boletos bajaron hasta casi nada y hubo muchos obsequios de última hora–. Acudieron a nutrirse el alma, a escuchar y entonar las vibrantes notas del Himno Nacional, ondear banderas y a pintar de verde, blanco y rojo el graderío. Son los que de cotidiano, presos de la nostalgia, entregan sus dólares a cambio de partidos moleros
, como los bautizó Ricardo Tuca Ferretti por su pésima calidad, y frente a los dominicanos hubo más de lo mismo. Hay victorias que saben a derrota.
La Federación Mexicana de Futbol sostiene toda su estructura gracias al ingreso que le dejan los partidos en Estados Unidos; no obstante, en su hora aciaga, a esa afición se le regatean palabras de respaldo… El Vasco Aguirre pecó de tibio. Tras negarse días atrás a abordar el tema de los migrantes en Estados Unidos –lo que le acarreó una ola de críticas en redes sociales–, dijo que la mejor manera de devolverles el apoyo es con su esfuerzo en la cancha, es lo que nos compete
y, con el triunfo, la gente se va contenta
… ¿Qué partido vio?… Su equipo tuvo pasajes deplorables y terminó arrinconado.
Los federativos, cuerpo técnico tricolor y dueños de clubes están amedrentados. Temen que les quiten las visas, los etiqueten de incitadores y sediciosos si dicen algo mínimo en pro de su gente, que les cierren el paso y luego no puedan cumplir el contrato con SUM (Soccer United Marketing), el cual vence en 2028… Sienten pavor de que su sueño americano, hace algunos años reforzado con la insulsa Leagues Cup, torneo que no interesa ni a los futbolistas y cuya nueva edición inicia en julio, se venga abajo como un castillo de naipes.
Los clubes y dirigentes fantoches están convencidos de que la tormenta pasará, la gente se mantendrá en el redil, comerá en la palma de su mano cualquier futbol basura que le lleven y seguirá soltando su dinero… Los dueños anhelan con que aparezca un mejor postor que Apollo Global Management (lo dijo Miguel Ángel Gil, del Atlético San Luis) y ponga sobre la mesa una fortuna que eleve al cielo el valor de sus mediocres clubes, en los que muy pocos invierten. ¿Y por qué piensan que su Liga es tan apetecible? ¡por el público afincado en Estados Unidos! Esa heroica población a la que miran de soslayo en su negra noche.
Que despierten de sus sueños guajiros, porque la realidad llama a la puerta. La Liga de Expansión está en pie de lucha por el retorno del descenso-ascenso, para que vuelva la verdadera competencia deportiva y, gracias al esfuerzo, más plazas del país tengan partidos de Primera División. Para que los equipos perezosos del máximo circuito, como los de TvAzteca y Grupo Orlegi, se activen o desciendan. La demanda está en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), además, atrajo el interés del gobierno. El senador José Clemente Castañeda anunció que invitará a los quejosos a exponer su caso.
Carlos Vela siempre fue diferente. Un futbolista virtuoso que salía de lo común y desdeñaba al Tri, porque muy pronto descubrió el lodazal que ahí subyace. El campeón del mundo Sub-17 en Perú 2005, hace un par de semanas colgó los botines y fue de los primeros en expresar abierto apoyo a la población migrante. No quedó desligado del futbol, pues su ex equipo, Los Ángeles FC, lo nominó embajador. En su cuenta de X expresó solidaridad con los inmigrantes en California, son gente trabajadora que merece respeto
, señaló.
Tras el susto ante los dominicanos, sería el desastre no ver mejoría el miércoles contra Surinam… Paralelamente se disputa el Mundialito, ese mismo día los Tuzos de Jaime Lozano debutan ante el Salzburg en Cincinnati. El Inter de Milán enfrenta el martes al Monterrey en el Rose Bowl de Los Ángeles.
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