El aumento de popularidad de ChatGPT fue la llave de la estandarización de la inteligencia artificial. Echando la vista atrás, la evolución de la herramienta de OpenAI provocó que millones de usuarios utilicen la IA a diario, razón por la que cada vez más países tienen interés en evolucionar la industria tecnológica local. Sin embargo, a medida que ChatGPT ha ido introduciendo nuevas funciones, Sam Altman (CEO de la compañía) ha sido cada vez más ambicioso con sus predicciones.
De hecho, lo interesante es que no solo lo ha sido con sus predicciones, sino también con sus deseos. Hace unas semanas, el creador de ChatGPT reveló su intención de lanzar una red social capaz de competir contra Facebook y X. Con ella, buscará recortar terreno a Elon Musk y Mark Zuckerberg en un sector determinante, un aspecto al que debemos sumar su particular cruzada contra los agricultores de Jaén a raíz de su forma de malgastar aceite. Sin embargo, la nueva idea de Altman ha sido calificada por los expertos de forma curiosa: “es tan emocionante como perturbadora”.
ChatGPT recordará toda tu vida
Como señala TechCrunch, la intención de Altman es que ChatGPT sea capaz de recordar toda la vida de una persona y, por ende, se convierta en una memoria integral y permanente. De esta forma, su visión pasa por un modelo capaz de sacar partido a un billón de tokens de contexto, un aspecto al que debemos sumar su intención de que la IA pueda razonar sobre todos los datos personales acumulados. Así, ChatGPT no solo recordará cada correo o libro leído, sino que también tendrá acceso a tus conversaciones o datos de otras fuentes para ofrecer asistencia personalizada en todo momento.
Esta idea de Altman podría aplicarse en otros ámbitos y, por ejemplo, nos serviría para ver cómo las empresas utilizan dicha capacidad de ChatGPT para gestionar toda su información corporativa apoyándose en la IA. De hecho, muchos universitarios ya utilizan ChatGPT como un espacio operativo personal, dado que suben todo tipo de archivos y crean flujos de trabajo. Ello, sumado a que muchos jóvenes ya consultan a ChatGPT para tomar decisiones de índole personal, ha provocado que el impacto de la IA en nuestra sociedad sea cada vez mayor.
Si se cumple el deseo de Altman, la IA sería capaz de encargarse de tareas como planificar viajes o compras de regalos de forma automática. Sin embargo, varios estudios ya han demostrado que los modelos de inteligencia artificial son capaces de hacer trampa si dicha situación les beneficia, razón por la que tener un asistente omnisciente presenta riesgos de privacidad y mal uso por parte de agentes con intenciones dañinas. Ello, sumado al impacto que está teniendo la IA en determinados campos, ha provocado que la idea de Altman, aún siendo interesante, sea vista con cierto escepticismo por sus posibles consecuencias.
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