¿Pensabas que para disfrutar de una tele con tecnología Mini LED de última generación había que hipotecarse el coche o vender un riñón? Pues no. TCL ha vuelto a hacerlo y este año ha lanzado una tele que es un auténtico bombazo calidad/precio. La TCL C6K ha llegado pisando fuerte, con prestaciones que hace nada estaban reservadas a la gama altísima, pero con un precio que no te hará llorar en la caja del MediaMarkt.
Lo más bestia de todo es que esta C6K viene con panel HVA (una evolución de los VA de toda la vida), con una retroiluminación QD-MiniLED, y un sistema de control de zonas que sorprende. Y si, ya hemos hecho una review completa en AVPasión, pero nos ha gustado tanto que queremos hablar más tranquilamente sobre todo lo que ofrece esta joyita sin necesidad de ponernos técnicos.
Vamos a ir desgranándola porque esta C6K es de esas teles que no se olvidan fácil. No es perfecta, como todo en la vida, pero ojo que tiene muchas más luces que sombras. Así que si estás buscando una tele nueva y no quieres dejarte el sueldo del mes, quédate que esto te interesa.
La TCL C6K, el televisor que ha hecho que el QD-MiniLED deje de ser prohibitivo
Empezamos por lo más importante: el panel QD-MiniLED con control por zonas y lente óptica OD. Esto suena a chino, pero lo que significa en cristiano es que el contraste y el control de la luz están a un nivel tremendo, incluso en escenas oscuras o con zonas brillantes. Lo que antes solo veíamos en teles de más de 1500 euros, ahora lo tenemos en una tele de 500-700 pavos dependiendo del tamaño. Una locura.
El panel HVA de TCL es otra de esas mejoras clave. Se trata de una nueva generación que mejora los puntos flacos del típico panel VA: los ángulos de visión son mejores y el contraste se mantiene altísimo. No llega al nivel de un OLED, vale, pero en negros y contraste lo hace tan bien que ni te planteas otra cosa por este precio. Y no lo decimos nosotros, lo dice la sonda de calibración en nuestras pruebas.
El diseño también ha mejorado mucho. Esta C6K apuesta por unas patas bastante prácticas (aunque no regulables en altura), que al menos están bien colocadas y te permiten poner una barra de sonido debajo sin que moleste. El plástico del chasis ha subido de calidad, se nota más resistente y mejor acabado. Vale, no es aluminio como en gamas premium, pero da una sensación de producto cuidado, que no es poco.
En la parte trasera nos hemos llevado otra sorpresa: el sistema de sonido 2.1 firmado por Onkyo suena bastante mejor de lo esperado. No es para audiófilos, pero oye, cumple para ver pelis o series sin tener que tirar de barra. Encima decodifica Dolby Atmos, Dolby TrueHD, DTS:X… todo lo que le eches, y sin pelearte con los ajustes si lo haces bien.
Eso sí, no todo iba a ser perfecto. El sistema antirreflejos es muy mejorable. Refleja hasta el alma. Si tienes luces delante o una ventana, lo notarás. Pero claro, ¿qué esperas por ese precio? Aquí TCL ha recortado costes, y se nota, aunque no empaña la experiencia en condiciones normales.
Conectividad de lujo y mando mejorado
Donde también han dado el callo es en conectividad. Tenemos 2 puertos HDMI 2.1, compatibles con VRR, 4K a 144Hz, FreeSync Premium e incluso con G-Sync aunque no de manera oficial. Para los jugones, esta tele no está nada mal. Input lag de 13,2 ms en modo normal, y en 4K a 120Hz baja aún más. Y todo sin sacrificar calidad de imagen ni desactivar zonas de retroiluminación.
Además, tenemos puerto óptico, Ethernet, USB 3.0 y sintonizadores completos, lo justo y necesario. Lo curioso es que el eARC está en un HDMI 2.0, no en los 2.1, lo cual es una genialidad para dejar los buenos puertos para la consola o el PC. Gracias, TCL.
El nuevo mando a distancia, aunque básico, es cómodo, fácil de usar y tiene accesos directos a todo: Netflix, Disney+, Prime Video, etc. Todo a mano, sin líos. Y al estar en el ecosistema Google TV, la experiencia Smart TV es TOP: rápida, intuitiva, personalizable y compatible con todas las apps. Además, Google Assistant está completamente integrado, así que puedes hablarle a la tele como si fuera tu colega.
Imagen SDR y HDR: lo mejor y lo peor
Aquí viene la parte técnica de esta TCL, pero te la voy a contar fácil. En SDR, la tele tiene un pequeño problema de calibración de fábrica: tira demasiado al rojo. Se ve todo como si lo hubieras pasado por un filtro de Instagram. Nada grave, pero se nota. Por suerte, en HDR está mucho mejor calibrada, y el resultado es espectacular.
La retroiluminación por zonas funciona de maravilla. Casi no hay blooming, el contraste es brutal y el pico de brillo llega a 675 nits. Puede que no suene mucho comparado con teles de 1500 euros, pero créeme, impacta y se nota. Además, es compatible con todos los formatos HDR: HDR10, HDR10+, HLG y Dolby Vision. Y sí, el mapeo de tonos no es perfecto, pero en contenido real apenas se nota.
Por cierto, el sistema Micro Lens OD (que suena a nave espacial) permite que la luz llegue mejor al panel. Es lo que hace que se vea tan bien sin necesitar tantos LEDs. Es como si TCL hubiera afinado el truco de magia.
Gaming: como si fuera una tele gaming pura
Ya te lo decía antes, pero lo repito porque vale mucho la pena. TCL ha metido todas las tecnologías punteras para jugar: VRR, 4K a 144Hz, soporte completo de HDR en juegos, y una nueva barra gaming (gamebar) espectacular, que te dice absolutamente todo lo que necesitas saber mientras juegas.
¿Problemas de compatibilidad con PS5 o Xbox? Ninguno. Lo hemos probado todo y va como un tiro. Además, no hay degradación de imagen en modo juego, algo muy raro de ver en teles con local dimming.
Precios y disponibilidad en España
La TCL C6K está disponible en varios tamaños, con precios aproximados en España:
- 50 pulgadas: 499 euros
- 55 pulgadas: 569 euros
- 65 pulgadas: 699 euros
- 75 pulgadas: 1.099 euros
- 85 pulgadas: 1.799 euros
- 98 pulgadas: 2.999 euros
Estos precios pueden variar según la tienda y las ofertas disponibles. Por eso, adjuntamos nuestro comparador de precios para que podáis ver fácilmente las mejores ofertas actualizadas según la tienda y el tamaño que más os interese. Así no tenéis que ir saltando de web en web: todo lo tenéis en un solo vistazo.
Un caramelito que se va a vender como churros
Si estás buscando una tele entre los 499 y 1.099 euros, la TCL C6K es una de las mejores opciones que puedes comprar hoy en día. Tiene cosas que hace solo un par de años eran impensables en este rango de precios: QD-MiniLED, panel HVA, control de zonas OD, HDR completísimo, HDMI 2.1, un input lag bajísimo y una calidad de imagen sobresaliente para lo que cuesta.
Tiene fallos, sí. El sistema antirreflejos es flojo, el modo SDR viene mal calibrado de serie, y el procesador Ai PQ Pro empieza a quedarse corto para tareas exigentes. Pero si lo valoramos en conjunto, la relación calidad/precio de esta C6K es de escándalo.
Así que ya sabes: si no quieres gastarte un dineral y quieres una tele de nueva generación, preparada para juegos, cine y series, con buena imagen, sonido decente y un sistema operativo rápido y versátil… esta TCL C6K es para ti.
Deja una respuesta