Por Daniela Medrano Rodríguez y Emilia Orozco Ibarra
El cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad han sido movimientos fantasmas para la población, marcas innovadoras, que ahora se preocupan por el impacto ambiental y la belleza, llegan con el objetivo de mostrarnos por qué es importante el tener una vida menos desechable y cómo adentrarnos a este nuevo estilo de vida que no solo generará un impacto dentro de nuestros baños.
Conocemos ya el consumo masivo de plásticos y botellas que se volvieron un conflicto para la sostenibilidad del planeta, acompañados de grandes problemas climáticos y “negligencias por parte de grandes marcas…” (Robles, 2017), la falta de compromiso con el medio ambiente de estas empresas es alarmante. Alberto Nassim Pineda Hernández, ingeniero químico y director de la empresa Hidra Quim en Guadalajara, dedicada a la venta de productos de limpieza y belleza a granel, mencionó que “para estas empresas, no es de suma importancia el saber si el lugar en donde se fabrican los productos que se embotellan y venden cumplen con las características de una industria limpia, ellos buscan obtener el precio más accesible para poder seguir vendiéndole al cliente de manera masiva.”
La industria de la belleza y la rama del cuidado capilar siempre ha buscado la exposición constante de desear cubrir las “necesidades” de cada cliente, utilizando la publicidad como un medio de persuasión para seguir vendiendo cantidades absurdas del mismo producto, sin importar el contenido y el proceso que cada botella tenga, “cada año se desechan alrededor de 552 millones de botellas de shampoo, y únicamente 1 de cada 5 personas recicla consistentemente los artículos de su baño”, así nace la verdadera preocupación por parte de la comunidad, donde los números son los que generan la necesidad de tomar conciencia, eliminando la venta a través de la mercadotecnia. Nassim Pineda mencionó igualmente que “la publicidad es lo que nos hace seguir consumiendo, hay botellas de muchas formas y tamaños, consumir a granel podrá no ser tan llamativo como eso, pero sin duda genera con el paso del tiempo un cambio que va de boca en boca”.
“La realidad es que se me hace mucho más cómodo comprar un shampoo de una marca que conozco de años que un despachador que solo me diga que es shampoo… por ejemplo” comentó Jimena Sánchez, estudiante de 22 años de edad de la Universidad Iberoamericana, este tipo de preocupaciones vienen ya preprogramadas por la publicidad de las mismas marcas que construyeron un monopolio para evitar el cuestionamiento de lo que realmente son los productos que consumimos.
A pesar de que los más grandes contaminadores son las generaciones que fueron expuestas a las redes sociales, los monopolios y el consumismo masivo, “de no tomar medidas ya, el cambio climático profundizará las desigualdades que causarán daños a las futuras generaciones.” (UNICEF, 2017), los mismos hechos avalan que la problemática ambiental y el impacto de la industria de la belleza, comienza a innovar y a desarrollar proyectos en donde nuevas marcas y empresas grandes buscan generar un cambio ante la adversidad que puede de un momento a otro convertirse en irreversible, algunas de esta empresas, ya comenzaron a vender sus concentrados, así como en el campo de la salud bucal, que tiene como nuevo proyecto crear una pasta totalmente sólida, ya hay varias marcas que están innovando en busca del bienestar ambiental” comentó nuevamente Alberto Nassim.

Foto: Pexels
El uso consciente de marcas orgánicas y biodegradables parte desde la innovación de conectar con la naturaleza después de un largo día en un contexto 100% urbanizado, con el paso del tiempo la economía y la ecología se toman de la mano para lograr darle la bienvenida a marcas que empatizan con la problemática ambiental y las necesidades capilares de los clientes que desean una nueva experiencia, disminuyendo de esta manera el impacto de la industria de la belleza, “yo comencé a utilizar los productos a granel porque leí que los shampoos comerciales tenían demasiados químicos y ahora siento que mi cabello se renovó totalmente ya que ahora lo lavo con productos que son 100% naturales”, comentó Natalia Álvarez, 18 años estudiante de la Preparatoria Ciudad de México.
Dentro de la Ciudad de México, con el paso del tiempo se han implementado tiendas y sucursales que buscan apoyar el consumo de la industria de la belleza a granel, así como promover la responsabilidad frente al impacto del medio ambiente.
Así como la conciencia y la responsabilidad sobre el uso de los envases plásticos para satisfacer cada necesidad de belleza por parte de la comunidad. La belleza podrá formar parte de las industrias que más publicidad generan y más target tiene, pero con el pasar de los años, la conciencia y el apoyo puede fomentarse, terminando con los monopolios que buscan solo un fin monetario, bloqueando a pequeños negocios verdes que buscan un bien común, ¿qué baño prefieres tener, uno que manifieste solidaridad y conciencia, o el comercial que busca ignorancia y negligencia?.
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