Hasta ahora, el proceso de instalación de Windows 11 había insistido, cada vez más, en empujar a los usuarios a pasar por el mismo identificados con una cuenta de Microsoft. La compañía, no obstante, había dejado un pequeño camino por el cual era posible saltarse este requisito. En Microsoft lo sabían bien y, aunque se pensaba que miraban hacia otro lado para ayudar a los usuarios, al final han tomado la decisión de bloquear este sistema. Eso cambia las cosas.
Adiós al único truco que quedaba
Tiempo atrás ya quedó claro que Microsoft quería que las instalaciones de Windows 11 se llevasen a cabo con cuenta de Microsoft y online. Era una señal de nuevos tiempos y de su afán de tener un mayor control sobre la forma en la que se instala el sistema operativo. No obstante, los usuarios sabían que podían usar un comando con la intención de hacer pensar a Windows que no había conexión a Internet. De esa manera, la instalación se podía llevar a cabo sin necesidad de identificarse con una cuenta de Microsoft. El uso de este comando conocido como BYPASSNRO no era lo ideal para Microsoft, pero el sistema seguía disponible y, quien lo necesitaba, lo usaba sin preocuparse. Ahora, ya ha sido bloqueado.
A partir de este cambio que ha realizado Microsoft, estar conectados a Internet se transforma en un requisito obligatorio. Y, al mismo tiempo, también es obligatorio que nos identifiquemos con una cuenta de Microsoft. Eso ocurre cuando comenzamos el proceso de instalación y antes de que avancemos a los momentos más determinantes de la carga de Windows 11. Hay que tener en cuenta que esto se aplica a cualquier nueva instalación que se realice, hasta a las instalaciones desde cero que se hagan en ordenadores que ya tuvieran Windows antes.
La versión que introduce el cambio
La actualización de Windows 11 que aporta este cambio significativo es la versión KB5035942 que ya está disponible en el circuito de versiones Insider Preview. Según comentan las personas que han tenido la oportunidad de cruzarse con este cambio, han probado todas las formas y opciones y ya no hay ninguna posibilidad de instalar Windows 11 salvo siguiendo las exigencias de Microsoft. Esto supone un cambio significativo, ya que en Windows 10 nunca se planteó este tipo de requisito y en Windows 11, como te decíamos, se había mantenido siempre, como poco, una forma de instalar sin cuenta. Hay que decir que incluso algunas versiones iniciales de Windows 11 ofrecían este sistema, aunque fue algo que Microsoft comenzó a incorporar tiempo después cada vez de una manera más agresiva.
Por ahora, este cambio, como te indicamos, está en la última versión de Windows Insider. Pero se espera que sea algo que se aplique a todas las versiones de Windows 11 en el mes de abril. Además, aunque todavía hay algunos métodos no oficiales para saltarse este requisito, como el uso de programas determinados, es muy probable que Microsoft acabe bloqueándolos. Al fin y al cabo, se ve con claridad que la intención de Microsoft es tenerlo todo bien atado y poder gestionar mejor a los usuarios de Windows 11.
Al poner la cuenta de Microsoft como obligatoria en la instalación, la empresa podrá interconectar sus muchos servicios y así gestionar con mayor profundidad la actividad de sus usuarios. Como te indicamos, se trata de una noticia que no ha sido bien recibida y que supone un cambio importante para el entorno de Windows. También es, en cierto modo, algo que sabíamos que iba a ocurrir y que está muy en la línea de los requisitos actuales de otros programas y sistemas. Además, que la solución que había hasta el momento fuera tan «alternativa», ya llevaba a pensar que a Microsoft no le hacía especialmente gracia que se pudiera utilizar.
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