Museo Aragón
Este es uno de esos espacios llenos de peculiaridad. Distinto a los grandes museos de la CDMX, el Museo Aragón se define como un resguardo para los “recuerdos de lo cotidiano y lo familiar”. Se ubica en una antigua vecindad en donde las habitaciones sirven como salas de exposición. Ahí podemos ver fotografías de archivo familiar, objetos que nos llevan al pasado e incluso vestimenta que nos conecta con historia de quienes estuvieron ahí antes que nosotros.
El Pan de María
Esta cafetería y panadería conquista por su ambiente entrañable y hogareño, se encuentra en una antigua casona en donde la iluminación cálida y la vegetación se apropian del lugar. No dejes de preguntar por las especialidades de temporada, ya que en su menú también hay sorpresas para cada estación del año. Este jardín secreto te va a enamorar.
Uroboros Alquimia con Café
Este espacio está dedicado a los amantes del buen café mezclado con la mística de un lugar que rinde homenaje a la cultura nórdica y los amuletos que nos recargan de energía. El pastel de matcha y la bebida Uroboros son de lo más recomendables para probar en este oasis dentro de la ciudad que promete tanto sabores inolvidables como relajación al máximo en cualquier día de la semana.
Pausita
Alejado de los grandes cafés de cadena, Pausita es un pequeño espacio a pie de calle que se siente como estar en la cocina de algún amigo listo para disfrutar de buenos sabores. Además de un buen café, aquí también podrás encontrar algunos tacos de guisado, tlacoyos y tortitas de verdolaga. Prepárate para vivir una experiencia diferente en este lugar con mucha identidad que te va a sorprender. A todos estos lugares puedes llegar en ECOBICI y pagar será muy sencillo al hacerlo con HSBC, no te los pierdas.
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