A lo largo de los 279 episodios de The Big Bang Theory vimos a Sheldon Cooper mostrar su afición por grandes space-opera de los 90 y los 2000 como Battlestar Galactica, Firefly y, claro está, todo Star Trek al completo. Sin embargo, pese a su afición por todas estas series de ciencia ficción, hay un programa que no soporta, tanto como para prohibir a Leonard, su compañero de piso, y sus amigos ponerla en su televisión y escribir a TNT una carta pidiendo su cancelación: Babylon 5.
Nunca se explica exactamente el motivo de su odio, más allá de contarnos que el físico teórico criado en el norte de Texas detesta sus diálogos, “si es que puede llamarse a eso diálogo”. Y desde el equipo creativo de la exitosa sitcom nunca se ha ofrecido una explicación a su animadversión al programa, pero puede que solo quisieran utilizar este programa de ciencia ficción como saco de boxeo para una broma y Babylon 5, al ser una producción de la casa (Warner Bros. Television), les pareciera una elección obvia y, quizás, menos problemática para las críticas.
Babylon 5 o Star Trek DS9: la batalla entre series
Pero hay otra teoría, esta más inteligente, que dice que todo en realidad refleja el odio hacia Babylon 5 que llegó a haber entre una parte del fandom de Star Trek en aquellos años. ¿La razón? Las acusaciones de algunos seguidores de Babylon 5 de que Espacio Profundo 9, un spin-off de The Next Generation, era un plagio del show creado por el también guionista de cómic J. Michael Straczynski. Aquello nunca se demostró, pero sentó las bases de una gran rivalidad que duró años. Tanto es así que todavía hoy encuentras temas preguntando cuál es mejor.
Babylon 5 narró a lo largo de cinco temporadas una historia serializada que su creador tenía planificada desde el primer capítulo
Y es una pregunta legítima porque el parecido entre ambas, hubiera inspiración de los ejecutivos de CBS y Paramount o no, es más que evidente, lo que favorece las comparaciones. ¿Mi opinión? Me la guardo, pero sí que quiero decir que ningún fan que se precie de las historias de ciencia ficción debería odiar la existencia de Babylon 5. Fue una propuesta pionera en el género hace ya 30 años, dejándonos cinco temporadas cuya historia principal fue pensada por Straczynski desde el inicio, permitiendo una profundidad narrativa y una cohesión rara vez vista en la TV, que en aquellos años seguía apostando por episodios autoconclusivos.
De pequeño siempre me maravilló los maquillajes de la serie.
Como Espacio Profundo 9, Babylon 5 nos llevaba hasta una estación espacial punto de encuentro entre diferentes razas alienígenas varios años después de una devastadora guerra. El objetivo de lugar no era otro que tejer una paz duradera entre la Tierra y otras especies de la galaxia, aunque como suele pasar en este tipo de producciones, no tardaríamos en ver toda clase de intrigas y conflictos, al mismo tiempo que sus 110 episodios nos permitían profundizar en un universo muy variado y diverso de pueblos y culturas alternativas a la de la humanidad.
Que Babylon 5 fuese una historia serializada y una no un programa episódico permitió a la audiencia ir descubriendo poco a poco a sus protagonistas, sus matices, y sus desarrollos a lo largo de cinco temporadas, y también que historias en la que nos prestábamos mucha atención al comienzo fueran cogiendo poco a poco importancia. En definitiva, un show de ciencia ficción que hizo lo que es común hoy, hace 30 años, dejándonos por el camino una serie entretenida.
Se usó mucho CGI en los 90, y 30 años después se nota y mucho.
Claro, que Babylon 5 ha envejecido como ha envejecido. Babylon 5 tuvo que usar mucho CGI porque era la única forma de hacer esta serie con un coste modesto y aunque entonces debió de ser bastante revolucionario, 30 años después le da un aspecto muy de videojuego de finales de los 90. Aún así, con la remasterización HD de hace unos años la serie se modernizó una pizca. ¿El problema? En España aún no he tenido la oportunidad de ver esta producción. en alta definición.
Esperemos que pronto sea rescatada en territorio nacional y que más gente pueda descubrir una serie de ciencia ficción que ningún fan del género debe detestar. En los últimos años también se habló bastante de un reboot, pero el proyecto quedó enterrado y a día de hoy no hay grandes novedades. Estaría bien la verdad, pero mucho me temo que la urgencia de la televisión de hoy haría inviable que Straczynski pudiera tejer una historia tan ambiciosa como antaño.
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