No hay duda que el planeta está experimentando notables cambios y que estos parecieran estar alterando el tiempo, provocando una sensación de que los días se alargan o se acortan, por lo que cualquiera podría preguntarse si estos cambios llegarán a ser tan profundos que sencillamente los relojes no podrán medir la duración temporal con precisión.
Ya no mediremos el tiempo en horas gracias a los cambios que se están produciendo
Quién no ha tenido la sensación de que algunos días se pasan volando mientras que otros transcurren lentamente, lo que sin duda podría atribuirse a las actividades que debe realizar la persona. Sin embargo, más allá de la percepción individual hay un fenómeno que está haciendo que la duración de los días ya no sea la misma.
Si consideramos que la duración del día y la noche está inducida por la posición de la Tierra en relación al Sol basta comprender que si este movimiento se ve afectado entonces tendremos días o noches de mayor prolongación, aunque en sentido físico todo día se cuenta en 24 horas, pero que sucedería si no fuera así.
El caso es que la rotación terrestre es inconstante y el descubrimiento científico es que los días se alargan poco a poco actualmente; de allí que se está produciendo un cambio muy poco perceptible que podría transformar profundamente la forma como mediremos el tiempo de ahora en adelante.
La realidad es que un día no tiene una duración de 24 horas sino 23, eso si tomamos en cuenta la rotación terrestre con exactitud, pues la misma es de 23 horas, 56 minutos y 4 segundos, una diferencia que corresponde al movimiento complejo terrestre y la manera como el planeta interactúa con el entorno.
Actualmente todo está influyendo para que tengamos en el futuro una jornada más larga
Aparte de que la rotación de la Tierra ha cambiado en el transcurrir de los siglos, pues de acuerdo a estudios de la Universidad Técnica de Múnich, algunos factores han estado influyendo en el ritmo con el cual gira el globo terráqueo. Entre los elementos causantes se pueden mencionar:
- Movimientos internos del núcleo
- Atracción gravitacional de la Luna
- Derretimiento de glaciares
- La composición de la atmósfera
- La temperatura global
Estudios señalan que a mediano plazo los días terrestres podrían alargarse más allá de las 24 horas reloj de hoy en día, esto como producto de las variaciones en la rotación de la Tierra. Es un fenómeno casi imperceptible en plazo breve pero que influirá significativamente en la forma cómo se mide el tiempo y por ende con el desarrollo de las actividades de las personas.
En un estudio realizado por un equipo de científicos de varios países en el área de la geofísica y astronomía se pudo comprobar la pérdida de aceleración en la rotación que realiza la Tierra, proceso que estaría siendo provocado por la influencia gravitacional lunar y una distribución de las masas terrestres, originando una mayor duración del día en unos cuantos millones de años.
Aunque la transformación se lleva a cabo con una lentitud extremada y parece no afectar la vida humana a mediano y largo plazo, son muchas las dudas que surgen en cuanto a la forma como los seres humanos podrían verse influenciados por una jornada más extensa, especialmente atendiendo al hecho de que los sistemas de medición temporal tendrían que ser ajustados.
Las próximas generaciones humanas contarán con un reloj de más de 24 horas
El reciente estudio científico desarrollado además pone de relieve la forma como los procesos geofísicos estarían influyendo sobre la Tierra y el comportamiento humano en cuanto a la percepción temporal, requiriendo esto de una mayor comprensión sobre las posibles consecuencias.
De todas maneras asombra saber que posiblemente las próximas generaciones humanas tendrían días con una duración mayor a las 24 horas, una solicitud que paradójicamente algunas personas de esta era hacen ante la necesidad de cubrir mayor cantidad de tareas cotidianas.
En conclusión, el planeta está cambiando tanto que se está alterando la medición del tiempo en el espacio pero el estudio de estas fluctuaciones en la rotación terrestre es importante no solo en el campo astronómico, sino además en el área de la creación de modelos climáticos, puesto que esto permitiría comprender con precisión fenómenos como El Niño.
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