Las segundas partes suelen ser bastante malas con respecto a la original… pero hay algunas películas que son la excepción✨ Como algunas secuelas de Disney que, no solo están al nivel de las primeras películas… sino que algunas son incluso MEJORES.
La Sirenita 2: Regreso al mar. Rara vez vemos qué pasa con las princesas después del “Felices para siempre” pero en esta historia conocemos a Ariel como mamá, lidiando con la rebeldía de su hija Melody.
Lilo & Stich 2. ¿Ubicas el meme de “No Lilo, soy peligroso”? Pues es de ESTA película. Te va a encantar porque vemos a Stitch luchando contra sí mismo y sus impulsos malvados con tal de mantener a salvo a Lilo y a su “Ohana”.
En Peter Pan: Regreso a Nunca Jamás es Jane, la escéptica hija de Wendy, quien termina capturada por el Capitán Garfio. Honestamente, a mí me gusta MUCHO MÁS que la original.
Cenicienta 2: Un sueño hecho realidad. En tres historias distintas nos enteramos de qué pasó con los personajes de la primera película después de la boda de Cenicienta. Nuestra favorita siempre será cuando Anastasia de enamora del panadero.
Las Locuras de Kronk nos cuenta qué pasó con el carismático secuaz de Yzma después de la primera película. Tiene drama familiar, romance y por supuesto muchas risas.
Pocahontas II: Un nuevo mundo. Si te rompió el corazón cuando Pocahontas no se quedó con John Smith, AGÁRRATE porque en la secuela hay todavía MÁS drama.
En Extremadamente Goofy, Max vive la pesadilla de cualquier hijo… QUE TU PAPÁ ESTUDIE EN LA MISMA UNIVERSIDAD QUE TÚ. Es la continuación perfecta de la primera película llena de deportes extremos, romance estudiantil y mucho amor de papá.
El Rey León 2: El reino de Simba… Es tal vez la más conocida, pero no podía quedar fuera de esta lista porque tiene TREMENDAS canciones, una villana a la altura de Scar y a Kobu, que nos hizo sentir cosas de la selva. 🔥🔥🔥
En Tierra de osos Kenai se reencuentra con Nita, su crush de la infancia, quien necesita romper el vínculo que los une para poder casarse con su prometido. Pero donde hubo fuego cenizas quedan…
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