Ciudad de México. En febrero y por segundo mes consecutivo, Consejo de Asistencia al Microemprendedor (CAME), una de las Sociedades Financieras Populares (Sofipos) más importantes del país, no reportó sus resultados financieros a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
CAME, la séptima Sofipo de mayor relevancia en el país medida por su cantidad de activos, reporta un nivel de capitalización menor al requerido por la autoridad y sus oficinas centrales en la Ciudad de México están cerradas. Un policía que resguarda el edificio de la Colonia Del Valle asegura que la empresa ya no está ahí.
Al llamar a su número telefónico, la empresa indica en un mensaje pregrabado que sus accionistas y su personal trabajan con un grupo de asesores para evaluar su situación financiera y definir las alternativas a seguir.
Ni las autoridades ni los organismos privados dan respuesta sobre la situación que atraviesa la firma financiera, que durante más de 30 años se ha especializado en otorgar microcréditos y tiene ahorros del público que superan los mil 500 millones de pesos.
CAME también rompió lazos con la empresa que les proveía el servicio de contacto en medios desde inicios de este mes.
La situación financiera de Came
Este martes la CNBV actualizó la información estadística del sector de Sofipo correspondientes a febrero. Los datos de CAME no están disponibles, al igual que en enero, la primera ocasión que omitió entregar resultados al organismo supervisor.
La última vez que CAME reportó sus resultados financieros a la CNBV fue en diciembre pasado: contaba con activos por cinco mil 380 millones de pesos, pero un nivel de capitalización de 102 por ciento, inferior al solicitado para estas instituciones, que es de 130 por ciento, según las leyes financieras nacionales.
El último reporte de CAME indica que cuenta con ahorros del público por una suma de mil 599 millones 930 mil pesos, mientras que el saldo de la cartera de financiamiento asciende a mil 724 millones 858 millones de pesos.
Por su parte, el saldo de la cartera vencida –aquellos préstamos que llevan por lo menos 90 días sin recibir un pago por parte de sus clientes—alcanzó los 41 mil 980 millones de pesos, el equivalente al 2.4 por ciento.
Sin paradero
Según la CNBV, al cierre de 2024 CAME contaba con un millón 371 mil 316 clientes y un total de 51 sucursales, lo anterior significa que en el último año, la Sofipo cerró un total de 243 sucursales.
Al tiempo que diversas sucursales permanecen cerradas en diversas partes del país, según reportes de usuarios en grupos de redes sociales, las oficinas centrales de la Sofipo, ubicadas en la Colonia del Valle de la Ciudad de México están cerradas.
Un policía que atiende a la puerta afirma que “tiene un rato que ellos ya no están aquí”, y en la entrada hay un letrero que indica que “en caso de alguna consulta o reclamación, CAME pone a su disposición el formato de aclaración en la página web, el cual deberás enviar vía correo electrónico a la Unecame en compañía de la copia de tu identificación oficial vigente”.
Mensaje al público
Al llamar al número que la Sofipo pone a disposición del público para hacer aclaraciones se escucha el siguiente mensaje:
“CAME está trabajando con un grupo de asesores especializados en la materia para evaluar la situación financiera de CAME y definir las alternativas a seguir. Le solicitamos mantenerse atentos a los canales oficiales de la Sofipo en donde se estará publicando mayor información.
“Les recordamos que conforme a los artículos 105 y 112 de la Ley de Ahorro y Crédito Popular, sus depósitos se encuentran protegidos por el fondo de ahorro por hasta 25 mil UDIS, equivalente a 210 mil 458.37 pesos al 31 de marzo de 2025. Agradecemos su interés y comprensión”.
Aplicación no está disponible
Por su parte Techreo, firma especializada en el desarrollo de tecnología financiera, dio a conocer el pasado 15 de abril que CAME “decidió finalizar el mantenimiento y desarrollo de su aplicación móvil.
“Techreo no actúa como entidad financiera, sino como proveedor de tecnología que colabora exclusivamente con instituciones financieras, ofreciendo soluciones digitales que optimizan sus servicios. La plataforma de Techreo nunca presentó intermitencias; es la entidad financiera quien ha decidido interrumpir el servicio. Los productos financieras ofrecidos a través de la aplicación son responsabilidad de CAME”.
No hay posturas
Este medio solicitó la postura de la CNBV y de la Asociación Mexicana de Sofipos (AMS) sobre la situación que enfrenta CAME.
“Sin comentarios por el momento”, dijo un vocero de la CNBV a La Jornada.
“La AMS no ha recibido ninguna comunicación oficial por parte de la sociedad o alguna autoridad, por lo que no hay comentarios al respecto”, respondió la AMS.
Por medio de su sitio de internet o sus redes sociales, CAME tampoco ha emitido una postura al respecto, mientras que la agencia de comunicación que proporcionaba el contacto con medios informó que la Sofipo rompió relaciones con ellos desde el primer día de este mes.
El fondo de ahorro
Los clientes que tienen dinero ahorrado con las Sofipos cuentan con el respaldo del Fondo de Protección de Sociedades Financieras Populares y de Protección a sus Ahorradores (Prosofipo).
En caso de la quiebra de una empresa, el Prosofipo retorna a los ahorradores un máximo de 210 mil 458.37 pesos.
Al cierre de 2024, el Prosofipo contaba con activos por 597 millones 162 mil 399 pesos, mientras que el saldo del ahorro de los clientes de CAME supera los mil 500 millones de pesos.
Multas recientes
La última actualización de sanciones de la CNBV indica que CAME recibió cuatro multas en abril, por un monto total de 142 mil 844 pesos.
Tres de las sanciones ya fueron liquidadas por la firma financiera y una aún está pendiente de liquidarse.
Las tres que ya fueron pagadas son por sucesos ocurridos en el año 2021. Dos de ellas son por “mo ajustarse en materia de control interno a las disposiciones aplicables” de la Ley de Ahorro y Crédito Popular y la otra por “no registrar en su contabilidad todo acto o contrato que significó variación en el activo”.
La que no ha sido liquidada, por un monto de 17 mil 376 pesos, es porque en 2020, la Sofipo “omitió funciones de contraloría interna que debieron contemplar el diseño de controles para que la elaboración de la información generada y proporcionada a las autoridades fuere fidedigna, precisa, íntegra y oportuna”.
Preocupación de trabajadores y clientes
Por medio de redes sociales, específicamente en Facebook, hay un grupo de clientes de CAME que desconocen cuál es la situación de la Sofipo.
“Pertenezco a un grupo de aproximadamente 50 personas de Chiapas que fuimos despedidos el pasado 31 de Marzo y es hora que no nos han pagado las liquidaciones, incluso no nos pagaron ni siquiera la quincena y no contestan las supuestas áreas que quedaron de dar seguimiento al cumplimiento de las liquidaciones”, se lee en una publicación realizada por un participante anónimo.
“Todos estamos preocupados ya que la Sofipo no da información ni a sus trabajadores activos. Estamos haciendo un llamado para poder unir fuerzas, los trabajadores activos y los que fueron despedidos junto con los inversionistas para que Pablo Varela, el director nos de respuestas”, se lee en otra publicación anónima.
Otras publicaciones son preocupaciones de supuestos clientes de la firma que se cuestionan qué hacer y a dónde acudir.
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