Sin duda, Pokémon se ha establecido como una de las sagas más longevas de toda la industria de los videojuegos. Para lograr este hito, sus responsables no se han dedicado únicamente a crear experiencias de captura de criaturas en diferentes regiones; si bien es cierto que dicha propuesta conforma el núcleo de las entregas principales, la franquicia ha visto nacer experimentos curiosos y, en algunos casos, increíblemente exitosos. Pokémon GO convirtió a los jugadores en verdaderos entrenadores a través de la geolocalización y la Realidad Aumentada, Pokémon Café Mix usa a los monstruos de bolsillo en rompecabezas, Pokémon Sleep incentiva buenos hábitos de sueño y el reciente Pokémon TCG Pocket lleva las partidas de cartas a los smartphones. En resumidas cuentas, la marca ha estado aprobando títulos de todo tipo desde sus inicios y no ha dudado en llevar a Pikachu y compañía hasta terrenos tan clásicos como el de Tetris.
¿Recuerdas Pokémon Pinball? Son muchos los jugadores que tienen buenos recuerdos de este título de Game Boy Advance, pues unía acertadamente las mecánicas básicas de un pinball con la captura de monstruos de bolsillo. Y podríamos decir que Pokémon Tetris es muy similar en su estructura, pues toma el ADN de la archiconocida experiencia de encaje de bloques para vincularla con Poké Balls y una Pokédex a completar. Lo más curioso de todo esto es que, además de todo lo que hemos mencionado hasta ahora, este juego de 2002 ha pasado muy desapercibido hasta entre fans de Pokémon por pertenecer al limitado catálogo de una consola que casi nadie conoce: Pokémon Mini.
El tetris de capturar Pokémon
Pokémon Tetris es exactamente lo que dice su nombre: un juego de Pokémon adaptado al contexto y mecánicas de Tetris. En cada partida, los jugadores deben encajar las piezas que caen desde la parte superior de la pantalla para eliminar líneas y evitar el Game Over. El ‘girito’ viene cuando aparecen Pokémon de forma aleatoria en el área de la derecha del monitor; ejemplares que se pueden capturar si el usuario logra eliminar cuatro o cinco líneas simultáneas. Si pasan unos cuantos turnos y no se cumple esta tarea, la criatura desaparece.
Pokémon Tetris tenía selector de dificultad (con Pokémon asociados para cada nivel), modo multijugador y eventos exclusivos para conseguir criaturas legendarias.
Si bien es cierto que hablamos de una experiencia sencilla, Pokémon Tetris tenía varias características que, en conjunto, conformaban una propuesta bastante completa para tratarse de un minijuego. Por un lado, el título contaba con un selector de dificultad que no sólo afectaba al tipo de figuras de Tetris que caían en la pantalla (con formas más enrevesadas en los niveles más altos), sino que además algunos ejemplares Pokémon sólo aparecían en las partidas más complicadas. Por si esto fuera poco, el juego también contaba con un modo multijugador para participar en una sesión 1v1 (donde cada línea eliminada iba al campo del contrincante) y se llevaron a cabo eventos exclusivos para conseguir a dos monstruos de bolsillo legendarios: Mew y Celebi.
Pokémon Tetris no tuvo una vida muy larga en la industria de los videojuegos. De hecho, su propuesta ni siquiera llegó a todos los rincones del mundo; desde The Pokémon Company lanzaron su título en Japón y Europa, pero nunca se llevó a cabo un estreno en EE.UU. Y esto es bastante sorprendente, pues el sistema de clasificación de edades ESRB registró la experiencia en su momento; probablemente, la entrega estaba preparada para extenderse en terreno estadounidense, pero los responsables decidieron dar marcha atrás a último momento. Sea como fuere, aquí no termina este curioso episodio de la historia de Pokémon, pues Pokémon Tetris no era el único juego disponible en Pokémon Mini.
Pokémon Tetris. Fuente: NintendoComplete en YouTube.
Pokémon Mini, la consola de Nintendo exclusiva de la saga de los monstruos de bolsillo
Además de ser una propuesta sorprendente para la marca de monstruos de bolsillo, Pokémon Mini también se establece como una de las consolas más desconocidas de Nintendo. El dispositivo portátil fue fabricado y distribuido por la misma Gran N allá por el año 2001 y se hizo exclusivamente para albergar minijuegos de la saga Pokémon. Y es que los de Kioto no veían Pokémon Mini como una videoconsola next-gen; era un aparato muy barato, tenía el tamaño de una caja de cerillas, sus gráficos eran mejorables y su calidad de sonido dejaba bastante que desear.
Tampoco es que Pokémon Mini fuera un hub gigantesco con todos los títulos de Pokémon. Realmente, la consola sólo almacenaba propuestas sencillas tales como Pokémon Party mini (una experiencia de minijuegos), Pokémon Pinball Mini (una idea mucho más simple que el ya mencionado Pokémon Pinball de GBA), Pokémon Puzzle Collection (para hacer rompecabezas), Pokémon Race mini (para participar en carreras) y otras ideas del estilo. En resumidas cuentas, el dispositivo sólo tuvo 10 títulos en total (cinco de ellos siendo exclusivos de Japón) y, al contrario que Pokémon Tetris, sí estuvo disponible en EE.UU.
Sea como fuere, la consola no registró un rendimiento comercial especialmente elevado. De hecho, se desconocen los datos de ventas en EE.UU. y Europa; en Japón, sin embargo, se llegó a distribuir 1 millón de unidades. Como ya es habitual en estos casos, Pokémon Mini ahora se ha convertido en un objeto de coleccionistas y su precio en el mercado de segunda mano se ha elevado significativamente a comparación del coste original de 2001. Aún así, no deja de ser un pedacito de historia que demuestra, una vez más, que la saga Pokémon está dispuesta a experimentar con lo que sea para sorprender a su audiencia.
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