Internet es un lugar repleto de una gran cantidad de proyectos que resultan extremadamente interesantes, hemos visto cómo hay algunos que ofrecen sistemas completos realmente interesantes mientras que otros utilizan un SBC para crear un dispositivo completamente nuevo. En este caso es posible que no sea nada nuevo, pero sí que es extremadamente peculiar ya que se trata de una consola retro que funciona mediante una Raspberry Pi… pero que se cuelga en la pared como si fuese un cuadro.
Las consolas retro han logrado convertirse en algo que cualquier persona puede llegar a querer, no solo por la capacidad que tienen para revivir los viejos tiempos, también por lo sencillo que resulta crear una desde cero con una serie de componentes básicos. Muchas de ellas hacen uso de una caja personalizada para ofrecer una estética antigua, pero también las hay que directamente buscan parecer obras de arte, y en este caso el proyecto que han creado desde el canal de Youtube Adafruit Industries es más que llamativo, ya que parece un cuadro pero realmente es una consola de juegos.
Esta consola retro no solo es funcional, también es una decoración impresionante
Para muchas personas los juegos retro siguen estando a la orden del día, uno de los principales motivos no es por el hecho de que sean fáciles de ejecutar en cualquier emulador, sino más bien tiene que ver con que resultan divertidos y no hace falta invertir una gran cantidad de dinero para poder jugarlos. Muchas veces es tan simple como poner en marcha una Raspberry Pi para poder comenzar a disfrutar de una gran variedad de títulos antiguos, pero está claro que hay niveles, y este proyecto seguramente esté en el máximo nivel de originalidad.
Y es que en este caso, John Park ha utilizado una Raspberry Pi 5 para crear una máquina recreativa de pared que utilizan una serie de paneles LED RGB como pantalla principal, logrando conseguir un aspecto atractivo que a la vez es divertido de utilizar. En este caso el creador indica que es una auténtica máquina recreativa que permite conectar mandos USB para jugar a cualquier título que la Raspberry Pi sea capaz de ejecutar, por lo general suelen ser juegos hasta la sexta generación (Sega Dreamcast, GameCube), siendo la única limitación que tiene las capacidades de visualización que tiene la pantalla, aunque no debería afectar a la mayoría de los juegos antiguos.
En este caso la Raspberry Pi 5 controla varios paneles HUB75 RGB mientras que a su vez también ejecuta el sistema operativo utilizado para jugar, y aunque parezca una broma también cuenta con una pieza sacada de Ikea, el marco que se utiliza para colgarlo a la pared. Obviamente además de esto también cuenta con unas cuantas piezas personalizadas impresas en 3D que permiten montarlo todo junto como los soportes que forman el diseño completo.
Para entrar más en detalle, utiliza una Raspberry Pi 5 de 4 GB conectada a cuatro paneles de matriz LED RGB HUB75 de 64 x 64 píxeles a través de un controlador Adafruit RGB que es el encargado de suministrar energía así como de transmitir los datos a las pantallas. El audio por su parte simplemente funciona mediante un altavoz USB externo.
Deja una respuesta